viernes, 5 de agosto de 2022

Programa doble: La cascada - Refugiado



Programa doble, sección en la que repasamos dos películas con aspectos en común.

Hoy: La cascada - Refugiado

 

En Pu bu (The Falls, La cascada, Mong-Hong Chung, 2021) Xiao Jing (Gingle Wang) parece al principio de la película la típica adolescente en crisis, le hace la vida imposible a su mamá, Lo Pin-wen (Alyssa Chia), la maltrata y destrata todo lo que puede. Pero estamos en Taiwán en plena cuarentena por la COVID y el encierro hace que a mamá la mente le juegue una mala pasada y deba depender de la hija, que se ve en la obligación de madurar a la máxima celeridad posible. La pobre mamá Lo Pin-wen tenía motivos de sobra para que le lloviera el techo: no había terminado de asimilar un divorcio con un conyugue que hasta ya tenía un hijo con la otra antes de separarse, la echaron del trabajo, está acuciada de deudas porque lleva años viviendo más allá de sus posibilidades y siente que la hija la culpa hasta del aire que respira. Pero como no todo es maldad y es posible hallar remedio si uno identifica el problema y puede expresarlo, de a poco irá saliendo. La razón de por qué el film se titula como se titula, le agrega un elemento fantástico al desencadenamiento de la psicosis que la llevó a perder la razón.

 

En Refugiado (Diego Lerman, 2014) Matías (Sebastián Molinaro) espera en vano en un pelotero que su mamá Laura (Julieta Díaz) lo venga a buscar al término de una fiesta de cumpleaños. La mamá de la cumpleañera lo llevará a su casa y al llegar descubrirán a Laura en el piso de la cocina, inconsciente y golpeada, tras una paliza propinada por su pareja Fabián (Agustín Rittano). Laura y Matías empiezan, entonces, un accidentado peregrinaje para apartarse de la violencia incontenida de Fabián. Laura intuye, y todos concordamos, que no habrá una próxima vez en que ella pueda contar el cuento. Si la hay, ella saldrá muerta. Pero los malos amores como los peores hábitos son difíciles de dejar. ¿Podrá?

 

La cascada y Refugiado se centran en dos mujeres desvalidas. Por suerte en ambas historias (más en La cascada, a decir verdad) hay gente buena, generosa, amable, dispuesta a ayudar. La corroboración, aunque sea en la ficción, devuelve la fe en lo humano. Por un rato.

Gustavo Monteros

La cascada y Refugiado pueden verse actualmente en Netflix


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